Gases encontrados en laboratorios farmacéuticos y bioanalíticos

Existe una amplia variedad de gases presentes en un laboratorio farmacéutico o médico. Muchos no tienen sabor, color ni olor, lo que dificulta saber si hay una fuga de gas. Una fuga de gas desde un cilindro o un sistema de tuberías fijas de gas supone un riesgo serio que puede causar un incidente potencialmente fatal o un peligro dentro del entorno de un laboratorio.

La industria farmacéutica es una de las industrias de más rápido crecimiento a nivel mundial. La mayor parte de los ingresos por ventas que genera se reinvierte en el área de investigación y desarrollo de nuevos productos. La investigación y el desarrollo utilizan una amplia gama de gases especiales y equipos. Los instrumentos analíticos, como cromatógrafos de gas, cromatógrafos líquidos y espectrómetros, todos dependen de la entrega adecuada de gas para operar de manera efectiva.

Estos gases farmacéuticos y médicos se fabrican específicamente para las industrias médica, farmacéutica y biotecnológica. Se utilizan con frecuencia para sintetizar, esterilizar o aislar procesos o productos que contribuyen a la salud humana.

Los gases farmacéuticos también son inhalados por los pacientes en una técnica conocida como terapia de gas. Los gases utilizados para la atención médica humana están estrictamente controlados tanto por la legislación como por los estándares industriales para no afectar la fisiología humana.

Gases encontrados en un laboratorio

Helio

El helio (He) es un gas muy ligero, inodoro e insípido. También es uno de los 6 gases nobles (helio, neón, argón, criptón, xenón y radón), llamados así porque no reaccionan con otros elementos y, por lo tanto, no pueden unirse a otros átomos para formar compuestos complejos. Esto le otorga un perfil de seguridad sólido y un posible uso en múltiples aplicaciones. Debido a su estado inactivo, el helio se utiliza a menudo como gas portador en laboratorios. El helio tiene muchos usos más allá de su aplicación más común, que es llenar globos, y su papel dentro del sector farmacéutico y biotecnológico es invaluable. Se utiliza principalmente en el laboratorio para enfriar imanes dentro de las máquinas de resonancia magnética (MRI), pero también se emplea en una amplia gama de áreas médicas, incluidas funciones respiratorias, cardiología, radiología y criología.

Argón

El argón (Ar) también es un gas noble con propiedades no reactivas. Además de su uso bien conocido en las luces de neón, a veces se utiliza en los sectores médicos y de biotecnología. Es el gas inerte preferido para su uso en líneas Schlenk y cajas de guantes en casos donde el nitrógeno pueda reaccionar con reactivos o equipos y también puede ser utilizado como gas portador en cromatografía de gases y espectrometría de masas por electrospray. En farmacéuticos y medicina, también se puede utilizar en el embalaje donde el nitrógeno pueda entrar en conflicto y también en la criocirugía y en láseres utilizados para soldadura vascular y corrección de defectos oculares.

Nitrógeno

Aunque no es un gas noble como el helio o el argón, el nitrógeno (N) también se utiliza comúnmente en la industria farmacéutica debido a sus propiedades relativamente poco reactivas en muchos procesos y aplicaciones diferentes. Los laboratorios lo utilizan principalmente para controlar la atmósfera de equipos y procedimientos muy sensibles. El gas de nitrógeno se aplica para controlar los niveles de oxígeno, la humedad y la temperatura en equipos de laboratorio, incluidos incubadores celulares, cajas secas, cajas con guantes y espectrómetros de masas.